Las tensiones siguen en aumento en Sueños de libertad, y este miércoles 12 de febrero no será la excepción.

Damián descubre que don Pedro ha intentado presionar a Andrés con el fin de apartarlo de la empresa. Tanto él como Marta consideran esta maniobra completamente despreciable. En medio del caos, el patriarca le pide a su hija que mantenga discreción con Fina y que se aleje de ella ahora que su boda con Pelayo se acerca.

Mientras tanto, en la fábrica, Irene comienza su nuevo puesto como secretaria de dirección con cierta resignación. A pesar de ello, la hermana de don Pedro no duda en ser eficiente y mantenerse informada para reportar todo a su hermano. Sin embargo, su primer día de trabajo se ve empañado por un tenso enfrentamiento con Claudia. Más tarde, don Pedro reprende a Irene por haber apoyado a Joaquín en medio del escándalo que rodea a Andrés.

Don Pedro no se detiene en su empeño por expulsar a Andrés de la empresa. Para ello, visita a María con la intención de convencerla de que persuada a su esposo para que venda sus acciones. No obstante, Begoña irrumpe en la conversación y lo acusa de actuar por venganza en lugar de velar por el bienestar de Perfumerías De La Reina.

Tras este enfrentamiento, Begoña advierte a Damián sobre las verdaderas intenciones de don Pedro. Poco después, su suegro le comunica que ha logrado gestionar una visita para que pueda ver a Andrés en prisión. Durante el emotivo encuentro, la enfermera aprovecha la oportunidad para demostrarle su apoyo incondicional y asegurarle que lucharán por su libertad.

Por otro lado, Jesús no pierde la oportunidad de avivar el conflicto entre María y Begoña. Le cuenta a su cuñada que Begoña ha visitado a Andrés en la cárcel, provocando un nuevo enfrentamiento entre ellas. Más tarde, Begoña se enfrenta cara a cara con Jesús y le deja claro que está completamente solo y que, si alguna vez se encuentra en la misma situación que Andrés, nadie moverá un dedo por él.

¡No te pierdas este capítulo lleno de tensión, traiciones y giros inesperados en Sueños de libertad!