La próxima semana en Sueños de libertad, la situación de Andrés se complicará aún más cuando el juez le niegue la libertad bajo fianza, argumentando que existe un alto riesgo de fuga. Esta decisión supondrá un duro golpe para él y su familia, pero lo que ninguno de los De la Reina imagina es que detrás de todo está don Pedro. Moviendo sus influencias en las sombras, él se asegurará de que Andrés continúe tras las rejas, haciendo lo posible para que no tenga salida. Como parte de su estrategia para perjudicarlo aún más, filtrará la noticia a la prensa, buscando hundirlo públicamente.

Pero sus maquinaciones no terminan ahí. Don Pedro visitará a Andrés en prisión con un claro propósito: presionarlo para que venda sus acciones de Perfumerías de la Reina. Su intención es deshacerse de él por completo y sacarlo del negocio familiar. Además, para reforzar su control sobre la empresa, propondrá que su hermana Irene se convierta en la nueva secretaria de la fábrica. Quiere tener ojos y oídos dentro de los Merino y los De la Reina, ya que no confía en ninguno de ellos.

Mientras tanto, Marta también acudirá a la cárcel para visitar a su hermano y, al mismo tiempo, hacer de intermediaria entre él y Begoña. Le llevará una carta de la enfermera, quien no ha dejado de pensar en Andrés ni un solo instante. Durante la conversación, Andrés le confesará a Marta sus sospechas sobre Jesús, convencido de que él pudo haber colocado su gemelo junto al cadáver de Víctor para incriminarlo. Sin embargo, ella no está del todo convencida de esta teoría.

Por su parte, Begoña seguirá sin rendirse y moverá cielo y tierra para demostrar la inocencia de Andrés. Cree firmemente que si logra demostrar que él estaba en Valencia en el momento del crimen, la Guardia Civil podría reconsiderar su caso y sacarlo de prisión. Su desesperación irá en aumento cuando reciba la carta de Andrés, en la que él le abrirá su corazón y le hará ver cuánto lamenta haber desperdiciado el tiempo sin atreverse a estar juntos.

Esta revelación impactará profundamente a Begoña, quien, tras leer sus palabras, se sentirá más decidida que nunca a ayudarle. Por ello, le pedirá a Damián que haga lo posible por conseguirle un permiso para visitarlo en prisión. La angustia por no poder estar juntos la llevará al límite, pero no permitirá que la desesperanza le gane.

Por otro lado, María continuará con una creciente sensación de inquietud. Su preocupación será evidente y su comportamiento empezará a llamar la atención. El peso de la culpa por lo que le está ocurriendo a Andrés y la muerte de Víctor la atormentará sin descanso. ¿Podrá seguir ocultando su verdad sin levantar sospechas? Además, su embarazo podría verse afectado por la tensión constante en la que se encuentra.

A medida que avancen los días, la culpa se hará más pesada para María. Los remordimientos crecerán dentro de ella y comenzará a cuestionarse si realmente puede vivir con este secreto. ¿Terminará confesándolo todo?

Las emociones estarán al límite en los próximos episodios de Sueños de libertad, donde la lucha de Begoña, las intrigas de don Pedro y los secretos de María podrían cambiar el destino de todos.